Una decoración de ensueño
En primer lugar, le hablaremos de lo que no va a ver en Rodas. ¡Sí, es un comienzo poco común! Este lugar albergó, en su día, una de las siete maravillas del mundo antiguo.
El coloso de Rodas, destruido probablemente por un terremoto, desapareció largo tiempo atrás.
Pero estamos seguros de que, en cuanto llegue a esta magnífica isla, podrá imaginar la estatua erigida en el año 280 a. C. en honor a Helios, el dios griego del sol. Con 30 metros de altura, conmemoraba la victoria de Rodas sobre Chipre.
La historia de Rodas, la mayor de las islas del Dodecaneso, es apasionante. Aún pueden verse restos de la ocupación de los caballeros de San Juan durante las cruzadas.
Aunque el coloso ya no siga en pie, podrá admirar muchos otros monumentos históricos.
Nuestra primera parada será Lindos, a unos 55 kilómetros de la ciudad de Rodas. La impresionante acrópolis de Lindos, con su templo dórico dedicado a Atenea y erigido en el año 300 a. C., domina el pueblo desde las alturas.
En el corazón de Lindos encontrará la iglesia de la Virgen María, con hermosos frescos del siglo XV, y las casas de los capitanes, construidas entre los siglos XVI y XVIII.
A nuestro regreso a Rodas, podremos conocer a fondo la historia de la isla en el barrio de los Caballeros.
Atravesaremos la puerta de Amboise, recorreremos la calle de los Caballeros y veremos las casas de las respectivas órdenes, que aún conservan sus escudos.
También podremos admirar el exterior del imponente palacio del Gran Maestre de los Caballeros de Rodas. Este castillo medieval, también conocido como Kastello, es uno de los pocos ejemplos de arquitectura gótica de Grecia. La ciudadela bizantina se construyó en el siglo VII, aunque el palacio no se erigiría hasta el siglo XIV.
Según estudios recientes, es posible que el lugar en el que hoy se alza el castillo fuera, en su día, el emplazamiento del coloso de Rodas.
Acompáñenos en un recorrido por el corazón de la fascinante historia de Rodas.